martes, 27 de septiembre de 2016

Sueños para mi centro




Me gustaría que en mi centro todos formásemos parte del mismo equipo.
Esta frase expresa uno de los grandes obstáculos con los que los profesores nos podemos encontrar, y es el hecho de que no todos los que formamos parte del mundo de los adolescentes jugamos en el mismo equipo. Los profesores formamos parte de su mundo, pero no somos los únicos que participamos de su educación. Evidentemente a la cabeza en esta labor están los padres. Y en muchas ocasiones existe una falta de cohesión o de intereses comunes entre padres, profesores, monitores… a la hora de educar a los chavales.
Para poder superar los problemas de fracaso escolar y de convivencia tan habituales en nuestros centros educativos es necesario que se dé una interacción entre todos los agentes de la comunidad educativa. La participación y la implicación de todos los agentes es algo fundamental para poder descubrir las causas de esos conflictos y para buscar soluciones basadas en la prevención. Esto debe partir del diálogo entre las partes implicadas (normalmente padres y profesores) y de la formación de las mismas.
Me gustaría que en mi centro todos los que rodeamos a nuestros chicos y participamos en su educación formásemos parte de un mismo equipo. Un equipo que juega unido y sigue las mismas reglas, reglas establecidas por los jugadores y no reglas impuestas y en ocasiones sin sentido.